Playroom Urbano // Santa Fe // 2017
Continuidad espacial y presencia arquitectónica.
En esta ciudad compleja, dinámica y frenética, surge la necesidad de construir un pabellón de encuentros en un pequeño patio de un barrio residencial consolidado de Santa Fe. Todo debía transcurrir en silencio y con mucha calma.
Siendo su posicionamiento indiscutible debido a las preexistencias (casa + piscina + cuarto de huéspedes) el presente proyecto concentró sus energías en mantener la continuidad del limitado espacio exterior.
Si bien el propósito estaba claro, varios interrogantes se hicieron presentes: ¿Cuál será la naturaleza de la forma arquitectónica? ¿Qué relación asumirá con la preexistencia? ¿cómo se organizarán sus componentes?
Nuestra respuesta buscó claridad. Tratándose de un proyecto de extrema continuidad espacial, el proyecto debía asumir un carácter invisible, homogéneo, sin extrañeza alguna. La continuidad de le preexistencia se daría por el color, pero la ruptura con la prexistencia reside en su técnica, en su tectonicidad y en su liviandad. Perceptivamente mimético, técnicamente contrastante.
Se propone así un entramado estructural regular laminar de madera, vinculado y pegado por encastres. Cuando dicho entramado adopta una posición vertical, es decir, se hace muro, adopta un carácter de servicio manteniendo siempre la coordinación geométrica con la organización de la totalidad.
[g+ Magdalena Carbone ]